jueves, 8 de diciembre de 2016

Y tu mas


!Y Tú Mas!
  
En mi libro "El Jefe: ¿Culpable o inocente?" propongo la imperiosa necesidad de exigir a los políticos un cambio dramático en su manera actual de hacer política, anticipándose a los problemas, en vez de reaccionar a ellos con medidas que sólo las paga el pueblo. Ellos no sufren las consecuencias, no se sabe de ningún político que haya sido desahuciado todavía.
Debemos exigir que se pongan de acuerdo en llevar a cabo un plan nacional de desarrollo de nuevos puestos de trabajo, de manera que cuando el partido de la oposición llegue a La Moncloa no lo cambie, con el consiguiente retroceso en el propósito.
Las decisiones tomadas por mayoría no son realmente democráticas, ni son lo que realmente necesita la nación. Más, si tenemos en cuenta que se llega a esa mayoría mediante un recurso acomodaticio con el acuerdo de un partido que busca algún beneficio a cambio de su "eventual apoyo". 
Que no es la mejor manera de tomar decisiones se sabe desde los años cincuenta, motivo por el cual les recomiendo que lean sobre el liderazgo Comprometido que se muestra con múltiples ejemplos de bien hacer en los capítulos 8 y 9 en los que se desarrolla la manera de liderar de dos grandes entre los grandes: Alfred Sloan Jr y Akio Morita, también pueden leer sobre los estilos Autoritario y Paternalista, que llevaron a la quiebra a GM, una empresa que había sido líder mundial durante décadas cuando fue gestionada de una manera que garantizó la máxima motivación de sus empleados.
Un ejemplo de que estos acuerdos no logran soluciones a futuro lo encontramos cuando analizamos "aquella componenda" entre el PSOE y el PP para que el PNV no pudiera lograr la mayoría cuando había sido el partido más votado en aquella ocasión (2009). Pues bien, los indicadores de aquella región dejan ver que hoy día hay más votantes que desean la gestión propia con un gobierno vasco.
 Eso es lo que han logrado con esa toma de decisiones artificiosa y mediocre. 
¿Alguien se ha puesto a pensar para qué sirven las sesiones de interpelación que se pueden ver por TV?
Cuando el interpelado no encuentra una respuesta decorosa para salir del enrollo en que se encuentra recurre al "¡Y tu más!" que solíamos usar de niños cuando alguien nos insultaba: "¡Gilipollas!" "¡Y tu más!" No demuestra que es honrado y competente sino que el que le acusa es peor que él o ella...sin embargo, y a pesar de lo poco útiles que son las interpelaciones se siguen haciendo...
Tienen mucho que cambiar.
¿Alguien se ha puesto a pensar por qué a estos políticos les importa tan poco los graves incendios que sufre la geografía nacional, año tras año? 
¿Alguien se ha puesto a pensar adonde vamos?...

Autor  Juan Esain

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