GRIFOS
ATASCADOS: Si el grifo de tu casa sólo
echa un hilillo de agua, o salpica por los lados, es que tiene cal el filtro.
Para
solucionarlo, desenróscalo y golpéalo contra una superficie dura. A
continuación, introduce las piezas en vinagre blanco hirviendo y déjalas en
reposo toda la noche.
Por la mañana,
enróscalo de nuevo. El agua saldrá a la perfección.
GRIFOS BRILLANTES: Cuando hayas limpiado el cuarto de baño o la cocina y quieras darle un toque extra de brillo a los grifos, pasa por encima una bayeta muy suave en la que hayas echado un chorrito de vinagre de vino blanco. Recuerda que basta con que la bayeta esté un poco humedecida para que resalte el brillo del cromado de los grifos.
La cal se deposita en los grifos, quita el brillo y deja unas antiestéticas manchas blancas en ellos.
Aplica medio limón o vinagre en un algodón o trapo. Solo tendrás que frotar las zonas manchadas e insistir en aquellas en las que haya mas acumulación de cal. Recuperarán su antiguo brillo de una manera sorprendente.
GRIFOS BRILLANTES: Cuando hayas limpiado el cuarto de baño o la cocina y quieras darle un toque extra de brillo a los grifos, pasa por encima una bayeta muy suave en la que hayas echado un chorrito de vinagre de vino blanco. Recuerda que basta con que la bayeta esté un poco humedecida para que resalte el brillo del cromado de los grifos.
La cal se deposita en los grifos, quita el brillo y deja unas antiestéticas manchas blancas en ellos.
Aplica medio limón o vinagre en un algodón o trapo. Solo tendrás que frotar las zonas manchadas e insistir en aquellas en las que haya mas acumulación de cal. Recuperarán su antiguo brillo de una manera sorprendente.
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